miércoles, 13 de abril de 2016

De mi libro PENSAMIENTOS A MI MANERA II

255. Yo no tuve más luz
que el blanco acrisolado de tu rostro.
Yo no tuve más paz que tu alma acunando mi alma.



259. Que nadie desaloje de tus ojos la risa.
Que nadie corte la palabra de tus labios.
Que nadie arranque de tus manos los gestos de ternura.
Que nadie anule la bondad de tu alma.



De mi libro "Más allá del amor"


Y por la senda, amor,
cogidos de la mano
a contraluz los pasos
en el silencio de la tarde,
yo libé de tu boca la amargura,
tu libaste el llanto salobre en mis mejillas.
Allí junto al mar de abedules
enterramos tus penas y las mías.
Tus brazos apretaron mi cintura
y te sentí tan dentro
que acaricié los sueños de tu alma
y te dejé que penetraras en la mía.